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4.2.6.2 PVM

Antes de poder iniciar un programa en PVM, debe inicializarse y configurarse la máquina virtual, para que al momento de realizar la ejecución, todos los nodos requeridos formen parte de ella.

La configuración de la máquina virtual se describe en la sección (2.2.11).

Una vez realizado esto, basta invocar al programa escrito utilizando PVM. Cabe observar que, ya que el programa se invoca directamente, y éste es el que se encarga de iniciar los procesos, se requirió un parámetro adicional para indicar al programa cuántos procesos se van a utilizar (parámetro -t).

$ ./matrix2 -d 650 -t 17
Este comando ejecuta el programa utilizando 17 nodos, o tareas, con una matriz de dimensión $650\times 650$.

El uso de la máquina virtual supone una versatilidad que no está presente con MPI, pues además de permitir controlar precisamente la configuración de la máquina virtual, la consola contiene facilidades para administrar los procesos que corren en la misma (comando reset para restaurar el estado de la máquina virtual, ps para visualizar el estado de los procesos, y algunos otros).

A pesar de ello, el uso de PVM resulta un poco menos limpio. El uso de la máquina virtual supone un paso adicional y exige al usuario un conocimiento más íntimo de la configuración de los nodos para poder agregarlos a la máquina virtual, tarea que en MPI se deja a la manipulación de archivos de configuración por parte del administrador.

Además, la terminación de procesos en PVM no es tan implícita como en MPI, y por lo tanto resulta menos limpia y un tanto inconveniente. Si algún proceso llega a fallar, los demás quedan en un estado indefinido, ocupando recursos en los nodos, y se hace necesario acceder a la consola de PVM y eliminar los procesos manualmente. En ocasiones, aún al concluir exitosamente la ejecución, algunos procesos quedan ``colgados'' requiriendo intervención del usuario para restaurar el estado de la máquina virtual.

En general la ejecución de procesos en PVM resulta hasta cierto punto más laboriosa y menos confiable que el que se observó con MPI.

Tanto con PVM como con MPI, la salida del comando debe ser similar a la presentada en la sección (3.1.2), ya que lo único que cambia es la sección donde se realizan los cálculos.


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2002-05-15